Son tres palabras, que para muchos no significan mayor cosa, o solo son referidos a ciertos grupos y organizaciones ajenas a la vida cotidiana que buscan mejores condiciones de vida y justicia. Estas tres palabras integradas son ahora la forma de atacar los grandes problemas de nuestra sociedad.
Dentro de Un Techo para Mi País, estas tres palabras resumen el fondo de nuestro trabajo, con el objetivo de erradicar la pobreza, como lo hacemos lo reflejan esas tres palabras. Rescatando algunas palabras de Calde en las múltiples entrevistas que se tuvieron este mes, podemos decir que, nosotros no somos un ministerio de vivienda, y por lo tanto no estamos para llenar de mediaguas El Salvador. Pero dado el abandono y la falta de políticas publicas para llegar a aquellos asentamientos donde muchos sobreviven con un dolar o menos al día, nosotros preferimos abarcar el "Pensar, denunciar y actuar", en lugar de lo que muchos de nuestros compatriotas hacen, un trifuerza de "Pensar, denunciar y quejarse"; nosotros preferimos actuar, demostrar que nuestro trabajo es la forma de protestar por ese Estado que ha olvidado a los más desprotegidos, que, según los Derechos Humanos deben tener acceso a esa vivienda digna.
Los techeros, podemos ser (algunos no todos) incoherentes, agnósticos, malos estudiantes, viciosos; que son cosas de bichos que algún día se superarán, pero, son personas con más patriotismo y ganas de ayudar que muchos "profesionales" encasillados en su vida cotidiana, por que saben que es lo que pasa en esos lugares donde no muchos quieren entrar. Estamos consientes del nivel de vulnerabilidad social y ofrecemos no solo solución temporal a un problema (la mediagua); sino que a través de Habilitación Social, se tiene un proceso para impactar de manera real en esa vulnerabilidad, reducirla y dar herramientas a las comunidades.
El contenido social vertido en el Techo, motiva a los voluntarios a dar el todo por el todo en las construcciones de mediagua y en las Mesas de Trabajo o en alguno de los planes de Habilitación Social; como dije para la nota de la colecta ELLOS LO VALEN. Ya no pasamos hablando, nuestra denuncia es ese proyecto de agua que se logro en esa comunidad, ese FONTECHO que ayudo a alguna porción de la comunidad, esa capacitación en oficios que se imparte, esa mediagua construida.
No somos, bichos sin oficio que pasamos en las calles una vez al año pidiendo.
No somos, bichos sin trabajo, todos estudian para conseguir uno o ya trabajan
No somos, jóvenes controlados por un determinado sistema.
Somos seres más pensantes que muchos, que solo exigimos mejores condiciones de vida; que pensamos en los demás, que no son arrastrados por intereses particular, que no vivimos para partidos políticos; somos SALVADOREÑOS que hacemos patria todas las semanas. Y que queremos que la sociedad se de cuenta que con halagos a la institución y nuestro trabajo no basta. Queremos transmitir nuestra incomodidad a todos, la pobreza un problema tan complejo, debe incomodarnos, no es una situación normal.
Ha seguirle dando que el pensar, denunciar y actuar; son las herramientas para hacer patria, amarla y cambiarla.
Dentro de Un Techo para Mi País, estas tres palabras resumen el fondo de nuestro trabajo, con el objetivo de erradicar la pobreza, como lo hacemos lo reflejan esas tres palabras. Rescatando algunas palabras de Calde en las múltiples entrevistas que se tuvieron este mes, podemos decir que, nosotros no somos un ministerio de vivienda, y por lo tanto no estamos para llenar de mediaguas El Salvador. Pero dado el abandono y la falta de políticas publicas para llegar a aquellos asentamientos donde muchos sobreviven con un dolar o menos al día, nosotros preferimos abarcar el "Pensar, denunciar y actuar", en lugar de lo que muchos de nuestros compatriotas hacen, un trifuerza de "Pensar, denunciar y quejarse"; nosotros preferimos actuar, demostrar que nuestro trabajo es la forma de protestar por ese Estado que ha olvidado a los más desprotegidos, que, según los Derechos Humanos deben tener acceso a esa vivienda digna.
Los techeros, podemos ser (algunos no todos) incoherentes, agnósticos, malos estudiantes, viciosos; que son cosas de bichos que algún día se superarán, pero, son personas con más patriotismo y ganas de ayudar que muchos "profesionales" encasillados en su vida cotidiana, por que saben que es lo que pasa en esos lugares donde no muchos quieren entrar. Estamos consientes del nivel de vulnerabilidad social y ofrecemos no solo solución temporal a un problema (la mediagua); sino que a través de Habilitación Social, se tiene un proceso para impactar de manera real en esa vulnerabilidad, reducirla y dar herramientas a las comunidades.
El contenido social vertido en el Techo, motiva a los voluntarios a dar el todo por el todo en las construcciones de mediagua y en las Mesas de Trabajo o en alguno de los planes de Habilitación Social; como dije para la nota de la colecta ELLOS LO VALEN. Ya no pasamos hablando, nuestra denuncia es ese proyecto de agua que se logro en esa comunidad, ese FONTECHO que ayudo a alguna porción de la comunidad, esa capacitación en oficios que se imparte, esa mediagua construida.
No somos, bichos sin oficio que pasamos en las calles una vez al año pidiendo.
No somos, bichos sin trabajo, todos estudian para conseguir uno o ya trabajan
No somos, jóvenes controlados por un determinado sistema.
Somos seres más pensantes que muchos, que solo exigimos mejores condiciones de vida; que pensamos en los demás, que no son arrastrados por intereses particular, que no vivimos para partidos políticos; somos SALVADOREÑOS que hacemos patria todas las semanas. Y que queremos que la sociedad se de cuenta que con halagos a la institución y nuestro trabajo no basta. Queremos transmitir nuestra incomodidad a todos, la pobreza un problema tan complejo, debe incomodarnos, no es una situación normal.
Ha seguirle dando que el pensar, denunciar y actuar; son las herramientas para hacer patria, amarla y cambiarla.
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